Qué ver en Zamora. Ruta urbana por los principales monumentos de la ciudad.


«La pasión por el románico solo se puede transmitir con pasión»

José María Pérez «Peridis»

Ruta urbana por la pasión de Zamora

A las cuestiones qué ver y hacer en Zamora responde esta publicación por medio de una ruta urbana por los 20 monumentos imprescindibles de la ciudad.

En cuanto a las sensaciones que trasmite, la pasión nace con la mayor exposición de arte románico por metro cuadrado que se pueda encontrar en Europa.

Sentimiento que se incrementa con el amplio catálogo de expresiones artísticas que atesora la ciudad.


Contenido de la entrada: Qué ver y hacer en la ciudad de Zamora.

Arte románico, modernismo y otros…

Antes de iniciar la visita, conviene saber que el casco histórico de Zamora, sobrio y elegante como el arte románico que acoge, cuenta con un rico patrimonio.

Acoge espléndidas muestras de estilo modernistas, representado en fachadas de diferentes edificios. Motivo más que suficiente para figurar en la Red de Ciudades Modernistas de Europa.

Ponen la guinda las esculturas de Baltasar Lobo, dispersas por plazas y jardines.

También pinturas murales y trampantojos jugando a engañar al viandante.

No falta el arte de la expresión escrita, con la ruta literaria de Claudio Rodriguez, e incluso citas literarias del Siglo de Oro en deslucidos muros.

Y a todo esto, hay que añadirle el arte en los fogones de la Bien Cercada Zamora.

¡Como para no apasionarse!

Catedral de Zamora
Catedral de Zamora
Arte románico en Zamora
Decoración de estilo románico
Escultura a la maternidad Baltasar Lobo
Escultura a la maternidad de Baltasar Lobo.

Plano de la ruta por los monumentos de Zamora (ciudad)

Qué ver y hacer en Zamora (ciudad)

1. Catedral

La catedral más pequeña de la comunidad de Castilla-León es, a su vez, la mayor muestra de románico tardío que tiene la ciudad.

Se construyó entre los años 1151 y 1174. Un espacio de tiempo muy corto para este tipo de edificaciones, lo que dio lugar a un templo uniforme en su estilo y armonioso.

El cimborrio es el elemento más emblemático, muy llamativo y visible desde cualquier lugar en los alrededores del templo. Está formado por un tambor en el que se abren numerosos ventanales y una curiosa cúpula gallonada cubierta de piedra con forma de escamas.

Destaca también la puerta del Obispo, siendo una de las más monumentales fachadas románicas que se conservan en España. Así como la imponente torre-campanario.

En el interior, el coro tiene talladas escenas de carácter profano basadas en la vida y costumbres de la época. Interesante también la talla de la Virgen de la Calva.

Cimborrio de la catedral de Zamora
Bello cimborrio de la catedral
Catedral de Zamora
Alrededores de la catedral de Zamora
Arquivoltas puerta del Obispo de la Catedral de Zamora
Las originales arquivoltas de la Puerta del Obispo
Catedral de Zamora
Puerta del Obispo
Catedral de Zamora desde el castillo
Vista de la catedral desde el castillo

2. Castillo

Los restos de las diferentes fortalezas que se ubicaron en este lugar, le dan a este espacio una imagen un poco caótica.
Pero merece la pena visitarlo, por dos razones:
1. Por las buenas panorámicas que ofrece de la catedral, el río Duero y la ciudad.
2. Para conocer la historia de esta fortificación; desde sus orígenes, en el siglo XI, hasta la gran reforma realizada en tiempos de Felipe V.
Está ubicado en una elevación natural y flanqueado por un foso de gran profundidad.
Castillo de Zamora
Escultura de Baltasar Lobo en los jardines del castillo

3. Plaza Mayor

Esta curiosa plaza cuenta con: dos ayuntamientos, restos de la primera muralla (Zamora llegó a tener hasta tres murallas) y una bonita iglesia románica en el centro.
No creo recordar ninguna otra Plaza Mayor con tan excepcionales características.
Es además, punto de partida de una de las calles más antiguas de Zamora, la entrañable calle Balborraz.
Ayuntamiento Viejo de Zamora
Ayuntamiento Viejo (S.XVI). Plaza Mayor

4. Iglesia de S. Juan de Puerta Nueva

De todo el patrimonio arquitectónico que guarda Zamora, no sabría decir que me impresionó más. Sí sé, que esta iglesia me apasionó.

Se empezó a construir en el S. XII, aunque las obras se prolongaron durante los dos siglos siguientes.  Su nombre se debe a que estaba pegada a la puerta de la muralla del primer recinto.
Lo más llamativo es la portada sur. Formada por arquivoltas de medio punto decoradas con flores y con un rosetón de rueda de carro.
En el interior, destaca la cubierta mudéjar de madera, que se apoya sobre dos grandes arcos. Esto consigue que sean tres naves en una sola dando sensación de amplitud y ligereza.
Por el valor artístico de las portadas, este templo fue declarado Monumento Histórico Nacional en 1961.
Junto a la portada sur se encuentra la escultura del Merlú. Escultura que representa a una pareja de congregantes de la cofradía de Jesús el Nazareno, cuya labor consiste en reunir a los demás hermanos para comenzar el desfile procesional.
Iglesia de San Juan de la Puerta Nueva
Escultura del Merlú junto a la iglesia de S. Juan de la Puerta Nueva
Arquivoltas decoradas con flores en la iglesia de san Juan de la Puerta Nueva
Arquivoltas decoradas con flores
Interior iglesia de San Juan de la Puerta Nueva
Interior iglesia de S. Juan de Puerta Nueva

5. Iglesia de Sta. María Magadalena

Este templo también merece una mención especial. El exterior, estilizado y armonioso, cuenta con una preciosa portada sur delicadamente decorada. Entre las joyas del interior, nos llamó la atención un bello y original sepulcro románico con dosel.

(No está permitido fotografiar el interior)
Portada de la iglesia de Santa María Magdalena. Zamora
Portada iglesia de Sta. María Magdalena
 
Iglesia románica de Santa María Magdalena en Zamora
Sta. María Magadalena

6. Santiago del Burgo

Única iglesia románica, junto con la catedral, que conserva su estructura original.
Tiene tres bonitas portadas. La portada sur destaca por sus dos arcos gemelos cuya unión no descansa sobre ninguna columna. Y la portada norte por sus cuatros arquivoltas decoradas con modillones.
Portada iglesia de Santiago de Burgo. Zamora
Iglesia de Santiago del Burgo. Portada norte
Portada iglesia románica de Zamora
Portada sur con arcos dobles que descansan sobre ménsula pinjante

7. Iglesia de San Esteban

Iglesia del siglo XII que mantiene intacto su exterior, pero no el interior que fue reformado en varias ocasiones durante el siglo XVIII.

Del exterior destacar las portadas y los ábsides rectos decorados con capiteles vegetales.

Aunque se encuentra en una pequeña plaza, un edificio de viviendas queda muy cerca de la iglesia, afeando esta construcción románica.
Iglesia de San Esteban en Zamora
Iglesia de S. Esteban

8. Iglesia de S. Vicente

Se edificó entre los siglos XII y XIII.
La torre y la portada son los elementos más interesantes de esta iglesia, declarada Monumento Nacional en 1961.
Aunque la portada no se conserva en perfecto estado si puede apreciarse su exquisita decoración con motivos vegetales y animales.
Portada iglesia de San Vicente en Zamora
Portada iglesia de S. Vicente

9. Iglesia de San Claudio de Olivares

Junto al río se levanta este templo del S. XII.
Sobresaliente la rica decoración que tienen las arquivoltas, los canecillos del ábside y los capiteles del interior.
Iglesia de San Claudio de Olivares 

10. Iglesia de San Isidoro

Se levantó en el s. XII dentro del  primer recinto amurallado de la ciudad. Pero solo el exterior conserva el estilo románico de origen.
Entre los elementos exteriores a destacar están: la cabecera (con un curiosos templete con cubierta de pizarra), la esbelta espadaña y los arcosolios (arcos ya utilizados en las catacumbas cristianas para albergar un sepulcro en la pared).
Iglesia de S. Isidoro en Zamora
Fachada con arcosolios

11. Iglesia de San Pedro y San Ildefonso

Fue construida sobre una iglesia visigoda. Se reformó en el s.XII en estilo románico, aunque con las reformas posteriores poco queda de este estilo.
Unos arbotantes que se apoyan en el edificio colindante fueron necesarios para mantener las modificaciones de la planta original realizadas en el siglo XV.
Iglesia de San Pedro en Zamora
 Arbotantes de la iglesia de S. Pedro y S. Idelfonso

12. Palacio de los Momos

Otro de los edificios dignos de admirar de Zamora.
Construido en el S. XVI, es un edificio renacentista pero con una decoración propia del gótico isabelino. Tal como puede apreciarse en los detalles de la fachada: escudos heráldicos, formas flamígeras sobre ventanas bíforas, exótica decoración con motivos vegetales, dragones y extraños animales…
Palacio de los Momos- Zamora
Palacio de los Momos

13. Puertas de Zamora

Zamora conserva algunas de las puertas que abrían el recinto amurallado: la de Doña Urraca (s.XII), la del Obispo (s. XI) y la histórica puerta de la Lealtad.
La puerta de la Lealtad, antiguamente llamada el portillo de la Traición, nos recordó la leyenda que se narra en el Cantar del Mío Cid.
Cuando Bellido Delfos entra por esta puerta perseguido por el Cid, tras haber engañado y dado muerte a Sancho II, quien tenía cercada Zamora desde hacia siete meses.
Puerta del Obispo
Puerta del Obispo
Puerta de la Lealtad
Puerta de la Lealtad

14. Murallas

En nuestros paseos por el casco histórico pudimos ver restos de los tres recintos amurallados que llegó a tener Zamora: correspondientes a los siglos XI, XII y XIII.
Con razón fue llamada «la Bien Cercada».
 Murallas Zamora

15. Aceñas de Olivares

Se trata de tres molinos harineros de los muchos que existieron en el tramo urbano del río Duero. Pertenecieron a la iglesia hasta la desamortización de Mendizábal.
Actualmente funcionan como museo y centro de interpretación.
Centro de interpretación Zamora. Aceñas de Olivares
Aceñas de Olivares
Ruta literaria Zamora
Cita del poeta zamorano Claudio Rodriguez

16. La casa del Cid

Edificio románico civil de los pocos que quedan en España. Actualmente es una casa particular y no se puede visitar, nos conformamos con ver la bonita puerta de la fachada.
Puerta del Obispo de Zamora
Fachada de la casa del Cid junto a la Puerta del Obispo

17. Puentes

De los cinco puentes que cruzan el Duero por Zamora, el más antiguo y emblemático es el Puente de Piedra. Construido en el s. XIII fue el único paso a la ciudad hasta la construcción en el S. XIX del Puente de Hierro.
El más reciente es el puente de los Poetas en honor al poeta zamorano Claudio Rodríguez.
Puente de Piedra de Zamora
Puente de piedra desde el mirador Zen
Puente de los Poetas de Zamora
Puente de los Poetas

18. Centro de Interpretación de las Ciudades Medievales

Un buen lugar para descubrir como eran las ciudades europeas durante la Edad Media, época en la cual Zamora tuvo su mayor esplendor.
Mediante paneles audiovisuales, maquetas, objetos… pudimos profundizar en este fascinante periodo de la Historia y conocer el desarrollo social, económico, cultural y el origen de las ciudades medievales.
El Centro también cuenta con un «mirador zen«. Un espacio con un amplio ventanal y unos cómodos sillones donde pudimos relajarnos contemplando el río a su paso por el Puente de Piedra. (Una buena opción cuando el cansancio empieza a manifestarse).
Centro de Interpretación Zamora
Maqueta de la famosa calle Balborraz en la Edad Media
Mirador zen

19. Edificios Modernistas

En nuestros paseos por Zamora nos encontraremos con atractivos ejemplos de edificios modernistas, incluidos en la Red de Ciudades Europeas del Modernismo.
Edifiicios modernistas en Zamora
Edificio modernista de Zamora
Casino de Zamora
Casino
Teatro Ramos Carrión de Zamora
Teatro Ramos Carrión

Dónde comer en Zamora

20. De tapas por Zamora

En Zamora se come de lujo.
Asados de cordero o cochinillo pueden ser el plato fuerte, aunque también los quesos y las legumbres son de gran calidad.
Si optamos por las tapas, nos sorprenderán con una exquisita cocina en miniatura.
De la Plaza Mayor sale una de las más concurridas calles para el tapeo: la calle Herreros. Pero existen otros muchos locales repartidos por la ciudad para disfrutar de la buena mesa.
Por supuesto, cualquier opción acompañada por los vinos con D. O Ribera del Duero o Toro.

Bares de tapas de Zamora

Otros detalles de Zamora

Poema de Lope de Vega en un muro de Zamora
Muro con poema de Lope de Vega
Escultura de Herminio Ramos en Zamora
Escultura del cronista oficial de Zamora, Herminio Ramos
Semana Santa de Zamora
La Semana Santa Zamorana plasmada en la pared

Como nuestra visita a Zamora fue en primavera, también pudimos contemplar los campos de colza en flor.

Campos de colza en Zamora

Para concluir la apasionada jornada, nada mejor que cruzar a la orilla izquierda del Duero por alguno de sus atractivos puentes. Y presenciar como el sol se esconde, remarcando la tímida belleza de Zamora.
Puesta de sol sobre Zamora

Puesta de sol en el río Duero a su paso por Zamora

Un poquito de la historia de Zamora

Por su estratégica situación, en una meseta rocosa al margen del Río Duero, Zamora siempre ha sido un enclave deseado por los diferentes pueblos y civilizaciones que poblaron España.

La leyenda cuenta que fue aquí donde nació el valiente Viriato, quien lucharía contra los invasores romanos.
Occellum Durii (ojito del río Duero) será el nombre puesto por los romanos durante su ocupación, llegando a ser una importante plaza en la Vía de la Plata que unía Mérida con Astorga.
A mediados del siglo VIII, es tomada por los árabes que la denominaron  Azemur (olivar silvestre) y Semurah (ciudad de las turquesas). Conquistas y reconquistas se suceden durante siglos hasta que vuelve definitivamente a manos cristianas.
En el siglo XI, Fernando I de Castilla la repobló y reedificó. Convirtiéndose en una de las principales ciudades fronterizas en la línea del Duero, frente a los territorios musulmanes del sur.

Zamora la Bien Cercada

Se produce un aumento importante de la población sobrepasando la primitiva muralla, por lo que se construye una nueva muralla y se extiende la idea de que Zamora es una ciudad inexpugnable, quedando en el acervo popular la frase «Zamora, la Bien Cercada«.

Zamora no se ganó en una hora

A la muerte de Fernando I queda repartido su reino entre su hijos. Su hija Urraca  hereda Zamora, pero su hermano Sancho II no está conforme con el reparto y cerca la urbe. El asedio duró siete meses y seis días ganándose la frase «Zamora no se ganó en una hora».
La tradición cuenta que Bellido Delfos engañó y dio muerte a Sancho II, y que huyó perseguido por el Cid hasta llegar a la puerta que se conocerá a partir de entonces como el portillo de la Traición (hoy Puerta de la Lealtad).
Es en el siglo XII cuando se configura la estructura urbana y se levantan la mayoría de sus edificios representativos (alcázar, iglesias, catedral).
En el siglo XV vuelven las luchas, se produce un enfrentamiento entre la Reina Isabel y su sobrina Juana la Beltraneja por hacerse con el trono. Termina en la Batalla de Toro con la victoria de los Reyes Católicos.

Zamora y la Guerra de las Comunidades de Castilla

El siglo XVI estará marcado por la Guerra de las comunidades. Zamora contará con un destacado guerrillero en la lucha de las comunidades contra el poder real: el obispo Acuña.
Durante la Guerra de la Independencia, las tropas francesas ocuparon la ciudad durante tres años, lo que supuso que se perdiera gran parte del patrimonio artístico y monumental.

Zamora Modernista

A finales del siglo XIX y principios del XX, Zamora vive un renacer de la agricultura, la ganadería y la industria harinera dando lugar a una pujante burguesía responsable del movimiento modernista.